IPCS |
Programa Internacional de Seguridad en las Sustancias Químicas |
Guía sobre seguridad y salud en el uso de productos
agroquímicos
Contribución de la OIT al Programa Internacional de Seguridad en las Sustancias Químicas (programa en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la Organización Internacional del Trabajo y la Organización Mundial de la Salud)
2. Seguridad y salud
La seguridad y la salud en el empleo de productos agroquímicos ha sido una de las principales preocupaciones de las organizaciones internacionales y de muchos gobiernos, empleadores y trabajadores y de sus organizaciones durante más de dos décadas. Algunos productos agroquímicos como los plaguicidas son sumamente peligrosos para la salud de los trabajadores y de la población en general, as! como también para el medio ambiente. Sin embargo, se pueden utilizar en condiciones de seguridad si se adoptan las precauciones adecuadas. En consecuencia, muchos países industrialmente desarrollados aplican reglamentaciones estrictas con respecto a la producción, venta y utilización de plaguicidas, los cuales constituyen el grupo más peligroso de los productos químicos destinados a la agricultura. Esos países han prohibido o restringido fuertemente el empleo de algunos plaguicidas muy peligrosos. Puede suceder que otros países se vean obligados a importar los productos agroquímicos prohibidos o de utilización restringida debido a necesidades concretas, por ejemplo, para erradicar una plaga particular. En estos países los beneficios económicos del desarrollo agropecuario compensan con creces los peligros posibles. Por ese motivo, aunque los problemas de seguridad y salud pueden variar de un país a otro, conviene establecer procedimientos claros y comunes para la utilización de los productos agroquímicos.
Todas las personas responsables de la producción, importación, almacenamiento y venta de productos agroquímicos tienen un papel que desempeñar para garantizar que se utilicen en condiciones de seguridad y de salud. Las organizaciones internacionales, los gobiernos, los empleadores y los trabajadores y sus organizaciones, y los dirígentes comunitarios tienen una función fundamental: instruir a los usuarios de productos agroquímicos acerca de los riesgos de las sustancias que manipulan, cómo penetran en el cuerpo, la índole de los efectos tóxicos y los métodos adecuados de utilización, y deben igualmente informarlos sobre los derechos y las responsabilidades de las autoridades públicas, otras organizaciones y la población en qeneral.
2.1. Cómo pueden penetrar las sustancias peligrosas en el cuerpo
La mayoría de los productos agroquímicos producirá un efecto adverso si penetran en el cuerpo. Los más tóxicos son particularmente peligrosos incluso en pequeñas cantidades. Muchos trabajadores agrícolas mueren y muchos más son envenenados o lesionados cada año a causa de la penetración de esas sustancias en el cuerpo; las principales vías de absorción son el aparato respiratorio (inhalación), la piel (absorción cutánea) y el aparato digestivo (ingestión) (véanselas figuras 4-6). Casi todos esos accidentes se pueden evitar impidiendo que los productos agroquímicos penetren en el cuerpo.
Figura 4. Inhalación
Figura 5. Absorción cutánea
2.1.1. Inhalación
Cuando los productos químicos destinados a la agricultura adoptan la forma de gases, gotitas finas de pulverización, polvo, emanaciones y humo, es más probable que penetren en los pulmones con la respiración. Los gases se mezclan con el aire. Otros productos tienden a permanecer suspendidos en la atmósfera durante cierto tiempo después de ser emitidos, por ejemplo, por la pulverización. A menudo esas partículas son tan pequeñas y están tan dispersas que no se pueden ver. Se sabe que la pulverización de productos agroquímicos sin precauciones adecuadas es una de las causas comunes del envenenamiento por inhalación. Los que utilizan fumigantes y gases corren un particular peligro de envenenamiento por inhalación. Los que se ocupan de los animales corren el riesgo de inhalar las emanaciones pulverizadas provocadas por los animales que se sacuden al salir de inmersiones de tratamiento veterinario.
Figura 6. Ingestión
2.1.2. Absorción cutánea
Es una de las vías de envenenamiento más corrientes. Los plaguicidas actúan contra las plagas y las destruyen atravesando la piel del insecto o la superficie de plantas que se consideran malas hierbas. Por consiguiente, esas sustancias pueden atravesar, fácilmente la piel humana intacta, si se deja que lo hagan. Algunos productos compuestos son especialmente peligrosos si, además de ser tóxicos, contienen disolventes penetrantes como queroseno, productos derivados del petróleo o xileno, que pueden atravesar las ropas de trabajo sin que se dé cuenta el trabajador. Cuando se trabaja en un ambiente caluroso que favorece la dilatación de los poros de la piel, el peligro es aun mayor, porque la absorción cutánea es más rápida; lo mismo ocurre cuando hay cortes, lesiones superficiales o enfermedades de la piel. Además, muchos productos veterinarios son sustancias químicas que pueden ser fácilmente absorbidas a través de la piel.
2.1.3. Ingestión
La higiene deficiente o prácticas incorrectas son a menudo la causa de contaminación de los labios y la boca o de que se ingieran accidentalmente productos agroquímicos. Entre las causas más frecuentes cabe citar el no lavarse adecuadamente antes de las comidas y el fumar durante el trabajo. Otro hábito incorrecto es el de tratar de limpiar la boquilla bloqueada de un pulverizador colocándosela entre los labios y soplando. En algunos países los plaguicidas y los productos veterinarios se trasiegan de grandes contenedores adecuadamente etiquetados a botellas sin etiquetas destinadas a la venta. Posteriormente, éstas pueden confundirse con bebidas no alcohólicas y consumirse. Estas prácticas deben prohibirse. Una sustancia tóxica puede causar la muerte incluso en cantidades mínimas si se ingiere de esta manera. Las sustancias tóxicas inhaladas pueden ingerirse al tragar la saliva contaminada.
2.1.4. Otras formas de contaminación
Muchos productos agroquímicos ocasionan efectos nocivos localizados al entrar en contacto con la piel o con los ojos, aun si no son absorbidos. Entre éstos cabe mencionar algunos plaguicidas, ácidos fuertes como el sulfúrico y álcalis fuertes como la sosa cáustica. En ocasiones, los productos veterinarios también provocan problemas cuando su utilización entraña la tarea complementaria de controlar al animal que se está tratando. Puede producirse por accidente la autoinyección o el rasgado de la piel con una aguja (figura 7). Estos accidentes pueden causar graves efectos nocivos localizados, según el grado de penetración en la piel.
Figura 7. Inyección de hierro a un cochinillo
para evitar la anemia (se debe poner cuidado al manejar las agujas)
2.2. Clasificación y medidas conexas
Ya se ha dicho que los trabajadores de la agricultura pueden estar expuestos a diversos productos químicos en el trabajo. La mayor parte de esos productos son tóxicos. Consecuentemente, todos los usuarios de productos agroquímicos deben saber cómo utilizar los productos de manera inocua aumentando sus conocimientos sobre los peligros que corren, tanto ellos como otras personas. El conocimiento es una defensa eficaz que se puede adquirir leyendo y entendiendo la etiqueta que figura en los recipientes. Si siguen estrictamente las instrucciones indicadas en la etiqueta, los usuarios de productos agroquímicos aprenderán a protegerse y a proteger a otras personas, el ganado, la fauna y la flora y el medio ambiente.
2.2.1. Clasificación
Los peligros de los míles de productos agroquímicos que se venden en el mercado se pueden clasificar como tóxicos, nocivos, corrosivos, irritantes, inflamables, explosivos u oxidantes. Algunos productos agroquímicos pueden ocasionar más de uno de esos peligros.
La palabra «tóxico» ya se ha utilizado en la presente gula para designar en general a cualquier sustancia que ocasionaría efectos nocivos si penetrara en el cuerpo. Debe advertirse que palabras como «tóxico» o «nocivo» tienen un significado concreto cuando figuran en una etiqueta. Esas palabras suelen ir acompañadas de un símbolo.
2.2.1.1. Toxicidad
La toxicidad de una sustancia está principalmente determinada por los resultados de las pruebas de laboratorio efectuadas con pequeños animales como las ratas. Esas pruebas determinan la cantidad de la sustancia que mata hasta al 50 por ciento de una muestra de animales para pruebas de laboratorio en un periodo especificado. Los resultados y, por consiguiente, la toxicidad de la sustancia se expresan de dos maneras, según que en el procedimiento de prueba los animales hayan ingerido o inhalado la sustancia.
Por ejemplo, una dosis letal 50 (DL 50) de 25 significa que, cuando a cada rata de un grupo se le aplicó 25 miligramos (mg) de la sustancia, la mitad de ellas murieron después de determinado período, dando por supuesto que cada rata pesaba 1 kilogramo (kg). En la práctica, la cantidad de la sustancia tóxica que se ha de inocular se calcula según el peso corporal del animal sometido a prueba. Por ejemplo, si las ratas sometidas a prueba pesaran medio kilo cada una, los alimentos que se les suministran tendrían que contener sólo 12,5 mg de la sustancia.
Nota: Los usuarios deben recordar también que los productos agroquímicos no están muy concentrados. Normalmente el ingrediente activo del producto agroquímico está mezclado con otras sustancias, en algunos casos está disuelto en una sustancia que podría atravesar la piel. El símbolo que figura en la etiqueta se determina sobre la base del peso o volumen porcentual del ingrediente activo del producto agroquímico. Por tanto, un producto con el 10 por ciento de ingrediente activo podría corresponder a una categoría de menor toxicidad que otro producto con el 25 por ciento del mismo ingrediente activo. Los fabricantes pueden pretender que el último producto es más potente, pero los usuarios deben recordar que es también más tóxico. |
Análogamente, una concentración letal inhalada a 50 (CL 50) indica la cantidad de sustancia que matará al 50 por ciento de la población sometida a prueba por inhalación.
En la práctica, el contenedor del producto agroquímico lleva el símbolo de clasificación del peligro y no indicará los valores DL 50 o CL 50. No obstante, conviene entender la relación entre ambos. Se debe recordar que cuanto menor sea el valor DL 50 o CL 50, mayor será la toxicidad.
Como existen numerosas variedades de sustancias agroquímicas, las etiquetas son también diferentes. Para describir los efectos nocivos se utilizan diversos símbolos en distintos colores, así como las palabras que figuran en la etiqueta. Por consiguiente, se debe poder entender lo que significan los símbolos y el texto.
Una etiqueta podría llevar el símbolo siguiente con alguno de los textos siguientes:
MUY TOXICO o TOXICO
Este símbolo con las palabras «muy tóxico» se utiliza para etiquetar una sustancia que, si se ingiere o inhala o si atraviesa la piel, puede provocar peligros para la salud sumamente graves, agudos (inmediatos) o crónicos (a más largo plazo) y hasta la muerte. El mismo símbolo con la palabra «tóxico» describe también a una sustancia sumamente peligrosa. La decisión de emplear la palabra «tóxico» se basa en los valores DL 50. En consecuencia, se requiere suma cautela para utilizar estos productos agroquímicos y es preciso seguir estrictamente las instrucciones que figuran en la etiqueta.
Las sustancias muy tóxicas y tóxicas Podrían igualmente designarse en la etiqueta según la categoría del peligro, por ejemplo categoría Ia y categoría Ib, respectivamente.
El símbolo siguiente con la palabra «nocivo» debe figurar en la etiqueta de cualquier sustancia que, si sé inhala o ingiere o si atraviesa la piel, puede entrañar riesgos límitados para la salud.
Podría también designarse como un producto agroquímico de la categoría 11. Debe advertirse que
la categoría U designa actualmente a una sustancia «moderadamente peligrosa» según The WHO recommended classification of pesticides by hazard and guídelínes to classification 1990-911
1 El Programa Internacional de Seguridad en las Sustancias Químicas (IPCS) del PNUMA/OIT/OMS ha publicado una versión revísada para una distribución límitada (WHO/PVS/90.1).
2.2.1.2. Irritabilidad
Se utiliza el mismo símbolo que para «nocivo», pero con la palabra «irritante» en algunas etiquetas. Esto significa que se trata de una sustancia no corrosiva que, con un contacto inmediato, prolongado o repetido con la piel o la membrana mucosa, puede causar inflamación.
Otras etiquetas especifican que una sustancia pertenece a la categoría III o a la categoría 4 o 5 de toxicidad, según la clasificación del país de que se trate. Puede haber otras etiquetas con las palabras «no pertenece a ninguna categoría de toxicidad». Esa clasificación está también vinculada con los valores DL 50. De cualquier modo, es importante seguir siempre las instrucciones que figuran en la etiqueta.
2.2.1.3. Corrosividad
El símbolo siguiente con la palabra «corrosivo» figurará en la etiqueta de cualquier sustancia que destruye los tejidos vivos si entra en contacto con ellos. Las salpicaduras de esas sustancias sobre el cuerpo pueden provocar graves quemaduras en la piel y la carne.
Nota: Mientras que la toxicidad, la irritabilidad y la corrosividad denotan peligros para la salud, existen otros símbolos que indican características físicas importantes. Los usuarios de productos agroquímicos deben entender esos símbolos y las palabras que figuran en las etiquetas. Este conocimiento es necesario para evitar lesiones y accidentes que pueden provocar la destrucción de maquinaria, equipo y bienes. |
2.2.1.4. Inflamabilidad
El símbolo siguiente con las palabras «muy inflamable» designa a un liquido que hierve a la temperatura corporal y que se incendiaría si estuviera expuesto a una llama. El mismo símbolo con las palabras «altamente inflamable» designa a una sustancia que:
El mismo símbolo con la palabra «inflamable» designa a cualquier sustancia líquida que se incendiaria si se la calentara por encima de la temperatura ambiente. Debería prohibirse fumar o encender una Rama cerca de sustancias inflamables. Tampoco se debe permitir que esas sustancias estén expuestas a la luz solar directa ni que se calienten.
El símbolo siguiente con la palabra «oxidante» describe a cualquier sustancia que libere mucho calor mientras reacciona con otras sustancias, en particular sustancias inflamables.
2.2.1.5. Explosividad
El símbolo siguiente con la palabra «explosivo» describe a cualquier sustancia que puede explotar por efecto de una llama o si está sometida a choques o fricciones.
2.2.2. Etiquetado y reetiquetado
El objetivo de una etiqueta es transmitir un mensaje acerca de qué es el producto, quién lo fabrica y cómo debe utilizarse para que resulte inocuo y eficaz. Se pone considerable empeño en que las etiquetas comuniquen al usuario el mensaje de manera clara, concisa y fácilmente comprensible.
De ello se deduce que, para que el producto sea utilizado con seguridad, los usuarios deben primero leer y entender la etiqueta y ajustarse a sus instrucciones. Esta es una actividad tan importante como cualquier otra que entrañe el empleo de productos agroquímicos, y no debe descuidarse. Si los usuarios tienen cualquier dificultad en esta primera etapa trascendental, deben solicitar asesoramiento antes de seguir adelante.
Algunos recipientes de productos agroquímicos son demasiado pequeños para que se les pueda pegar o fijar una etiqueta. En esos casos se debe pegar o unir firmemente al recipiente una hoja de información. Los usuarios deben siempre asegurarse de que los pequeños recipientes van acompañados de una hoja de información. La información podría también abarcar cualquier documento que se facilite por separado en un embalaje, por ejemplo, documentos de información sobre el producto o fíchas técnicas de seguridad sobre la utilización del producto químico. El usuario no debe pasar por alto este material informativo.
En la información que contiene la etiqueta se procura identificar un producto y describir cómo, cuándo y dónde debe utilizarse. La etiqueta se completa con detalles de los peligros potenciales, las prácticas correctas, las precauciones de seguridad, las instrucciones relativas a los primeros auxilios y consejos destinados al personal de salud.
Antes de utilizar cualquier producto agroquímico, el usuario debe leer la etiqueta y captar la información. Se debe indicar lo siguiente:
Los usuarios deben leer siempre la etiqueta antes de proceder a la utilización o, si no entienden las instrucciones, deben preguntar a alguien que sepa. Si la etiqueta es demasiado pequeña y no resulta legible, deben emplear una lupa o pedir a alguien que tenga mejor vista que se la lea. Si está rota o borrosa, es posible que sea necesario pedir al abastecedor que proporcione otro recipiente en el que la etiqueta resulte legible.
Los productos agroquímicos pueden trasvasarse de recipientes etiquetados a otros recipientes o equipos. Esa operación la pueden realizar los abastecedores que importan cantidades a granel o el usuario en la explotación agrícola. En cualquier caso, la persona encargada del trasvase debe velar por que esos otros recipientes sean reetiquetados. En el reetiquetado es preciso asegurarse de que el contenido está identificado de manera que se den a cono cer a los usuarios:
Para mayor información, cabe remitirse a Directrices para el etiquetado correcto de los plaguícidas, de la FAO (Roma, 1985), y Pictograms for agrochemícal labels/Píctogrammes pour les étiquettes de pesticides (no existe versión española) del Grupo Internacional de Asociaciones Nacionales de Fabricantes de Productos Agroquímicos (GIFAP), concebido en colaboración con la FAO (Bruselas, 1988).
2.2.3. Fichas técnicas de seguridad sobre la utilización de sustancias químicas
Con respecto a cada producto agroquímico etiquetado, los abastecedores deben disponer de una ficha de datos sobre la utilización del Producto en condiciones de seguridad. Dichas fichas se deben suministrar a los empleadores, responsables agrícolas y extensionistas, así como a los dirigentes de la comunidad. Esas fichas de datos contienen una información detallada esencial con respecto a la identidad y clasificación del producto, los riesgos que entraña, las precauciones de seguridad adecuadas y los procedimientos de urgencia. En el anexo C figuran algunos ejemplos de este tipo de fichas técnicas de seguridad.
2.2.4. Identificación
Como ya se ha mencionado, todos los productos agroquímicos deben estar etiquetados o marcados (figura 8). La etiqueta debe indicar la información esencial con respecto a la identidad, la clasificación, los peligros que entraña y las medidas de seguridad que se han de respetar. Además, debe incluir la información sobre la utilización que se describe en la sección 2.2.2. Los productos agroquímicos menos peligrosos, como algunos fertilizantes, deben también marcarse. En el marcado se debe dar información sobre la identidad y propiedades importantes relacionadas con la seguridad y salud de los usuarios, así como el nombre y la dirección del abastecedor.
Figura 8. Todos los productos agroquímicos deben ser etiquetados o marcados
Además de los datos esenciales que figuran en la etiqueta, los productos agroquímicos menos peligrosos deben ir acompañados de documentos de información sobre el producto. Esos documentos resultan indispensables cuando no se facilitan fichas de datos sobre la utilización segura de los productos químicos. Esa información se ha de proporcionar al usuario, sin costo adicional, porque es importante. Cada usuario debe leer, entender y aplicar las instrucciones destinadas a garantizar la seguridad y la salud en el empleo de productos agroquímicos Esa información debe incluir lo siguiente:
Con respecto a los productos agroquímicos que sólo se han marcado para indicar su identidad y que no cuentan con una etiqueta, el abastecedor debe proporcionar a los empleadorés y otros usuarios que lo soliciten información para determinar cualquier medida de cautela que sea necesario adoptar durante el transporte, la manipulación, la utilización y la eliminación.
Los usuarios de productos agroquímicos no deben utilizar el producto hasta que hayan leído y entendido la etiqueta o el marcado. Deben solicitar el asesoramiento del empleador, el extensionista agrícola o el dirigente de la comunidad en caso de duda.
Cuando un producto agroquímico no se conoce y no se dispone de información relativa a su utilización sin peligro, no se debe usar. Si no se consigue descubrir su identidad, se debe eliminar sin incurrir en riesgos, tal como se describe más adelante en la guía (véase la sección 2.3.9).
Temas de debate y actividades (secciones 2.1 y 2.2)
Recuerde: Si la etiqueta no facilita información sobre los riesgos y medidas preventivas, debe obtener la información pertinente de] comerciante minorista, otro usuario o un dirigente de la comunidad antes de utilizar el producto agroquímico. |
Recuerde: Se ha de pedir al comerciante minorista una ficha de datos de seguridad de producto químico. Llévesela a alguien que pueda explicarle la clasificación, Esto es particularmente importante, si en la etiqueta no se indica la clasificación. |
Algunos productos agroquímicos como los fertilizantes pueden no estar clasificados. En esos casos pídase al comerciante minorista información o documentación sobre su uso efectivo en la que se den datos esenciales sobre la seguridad.
2.3. Manipulación y utilización en condiciones de seguridad
En la presente sección se trata del embalaje, el transporte, el trasvase, el almacenamiento, la preparación y mezcla, la aplicación de plaguicidas, otras aplicaciones de productos agroquímicos, el derramamiento y la eliminación de recipientes y desechos.
Como la aplicación de plaguicidas es una actividad importante en la utilización de productos agroquímicos y al mismo tiempo la más peligrosa, se examinan por separado las precauciones que se han de tomar antes, durante y después de la aplicación.
El almacenamiento, el manejo de los derrames y la eliminación son también actividades peligrosas. Se describen las precauciones que se han de tomar para la protección de los usuarios así como del público en general y del medio ambiente.
Se hace asimismo referencia a una serie de pautas de la FAO que guardan relación con la presente sección. Entre ellas cabe mencionar las siguientes:
Lista de productos agroquímicos almacenados, según la clasificación (pregunta 4)
Clasificación |
||||||||
Muy Tóxico | Tóxico | Nocivo | Corrosivo | Irritante | Inflamable | Oxidante | Explosivo | Número total de propiedades |
2.3.1. Embalaje
Los productos agroquímicos se suelen suministrar en diversos envases1. Estos pueden variar considerablemente en cuanto al tamaño, pasando desde una pequeña botella o caja hasta un gran tambor de metal o plástico. Los envases se fabrican de vidrio, metal, material plástico o papel y en algunos casos están sometidos a una gran presión interna. Gases licuados como el bromuro de metilo o el amoníaco anhidro pueden evaporarse dentro del recipiente y ejercer presiones sobre sus paredes. Los envases han de ser resistentes a esas presiones y a la acción corrosiva de las sustancias químicas.
1
Hay excepciones. Algunos fertihzantes como la cal viva, roca de fosfato y la escooria básica se pueden suministrar a granel en camiones.Los usuarios de productos agroquímicos deben saber que cada envase debe adecuarse a las normas y disposiciones nacionales que se aplican al embalaje de productos agroquímicos. Es posible que en algunos países no existan reglamentaciones de ese tipo. En consecuencia, los usuarios deben estar al tanto de los requisitos generales para el embalaje. Esta información será útil para determinar qué productos agroquímicos están adecuadamente embalados en el momento de la compra. Los productos mal embalados pueden ocasionar peligros para la salud.
El envase de un producto agroquímico debe estar diseñado y construido de manera que:
Los usuarios deben entender claramente que el envasado y reenvasado de los productos químicos queda fuera de su competencia hasta que hayan recibido una instrucción para ello. Además, no deben intentar nunca volver a envasar ningún producto químico en un recipiente no destinado para este uso. Incluso si hubiera contenido el mismo plaguicida, existe por ejemplo el peligro de que el envase pueda estar dañado o que la tapa no cierre adecuadamente. Los usuarios corren el peligro de contaminarse con sustancias tóxicas aunque sólo traten de examinar si un recipiente está en condiciones de volver a ser utilizado.
Figura 9. Apertura de un recipiente
correctamente diseñado
2.3.2. Transporte
Los fabricantes, exportadores e importadores de productos agroquímicos deben atenerse a las reglamentaciones internacionales relativas al transporte y la seguridad. Es posible que tengan también que cumplir disposiciones nacionales. Los usuarios de productos agroquímicos deben saber que existen reglamentaciones de ese tipo. Deben asimismo interesarse por el transporte, que puede realizarse desde los abastecedores hasta la explotación agrícola o desde el almacén al terreno. Para que un transporte sea seguro, es preciso que:
En la figura 10 se muestra la carga de plaguicidas en un camión.
Figura 10. Carga de plaguicidas en un camión
2.3.3. Trasvase
Sólo en casos muy excepcionales deben trasvasarse los productos agroquímicos de un recipiente a otro. El trasvase o trasiego tiene múltiples desventajas, entre las que cabe mencionar la posibilidad de que un producto agroquímico se pueda beber por error al confundirlo con una bebida no alcohólica. Por tal razón, en muchos países se prohíbe esa práctica.
Cuando en circunstancias excepcionales es preciso trasvasar productos químicos de un recipiente a otro, el recipiente receptor debe:
no llenarse excesivamente con un líquido para que no se puedan producir derrames al verterlo o por causa de una expansión del volumen debido a un aumento de la temperatura.
Se han de adoptar medidas de precaución al trasvasar los productos químicos. Se debe prestar particular atención a la ropa protectora, a la eliminación del liquido derramado, a la higiene personal y a evitar la contaminación de cualquier alimento.
2.3.4. Almacenamiento
Habitualmente los productos agroquímicos son entregados en un almacén por el abastecedor o transportados por el usuario. Después de cada uso parcial en la explotación agrícola suelen volver al almacén. Durante el almacenamiento son muy vulnerables al robo, el vandalismo, la utilización indebida, accidental o deliberada, o los efectos de condiciones climáticas extremas. Los usuarios que han de almacenar productos agroquímicos deben saber cómo construir y mantener un lugar para su almacenamiento, con el fin de garantizar su propia seguridad y la de otros. Deben asimismo adoptar las medidas necesarias para evitar la contaminación del medio ambiente.
Figura 11. Almacén de productos
agroquímicos correctamente diseñado
En general, un almacenamiento en condiciones de seguridad debe garantizar el emplazamiento correcto para facilitar el acceso en el momento de la entrega del producto agroquímico y de su traslado a los vehículos que lo transportarán a la explotación agrícola. Si el almacén se encuentra dentro de un edificio de uso general, debe estar separado de otros depósitos como los de materiales inflamables. En la ubicación del almacén se deben asimismo tener en cuenta los posibles riesgos de contaminación debidos a fugas y derrames. El almacén debe estar situado lejos de zonas residenciales y de aguas de superficie como ríos, corrientes y depósitos utilizados para el abastecimiento de agua potable o de riego. En la figura 11 se muestra un almacén de productos agroquimicos.
Los almacenes no deben estar situados:
Debe haber una capacidad suficiente para el almacenamiento de la cantidad máxima de productos agroquímicos y deben tomarse medidas para la apilacion en condiciones de seguridad y de fácil acceso.
Los usuarios deben también asegurarse de que cualquier edificio utilizado para almacenar productos agroquímicos:
Figura 12. Evitar la exposición de los recipientes
de productos agroquímicos a la luz directa del sol
Figura 13. ¡Cuidado, peligro! ¡Almacén de plaguicidas!
Se prohibe el acceso a las personas no autorizadas
Figura 14. Los productos agroquímicos se
deben guardar en armarios cerrados con llave
Otras consideraciones:
2.3.5. Preparación y mezcla
Los productos agroquímicos como los fertilizantes, los polvos y los gránulos pueden suministrarse listos para ser utilizados. Otros, corno los plaguicidas, han de medirse a partir de compuestos concentrados y mezclarse, por ejemplo, con agua. La distribución de los productos agroquímicos de esta manera exige un particular cuidado para que se realice en condiciones de seguridad y con eficacia. Para ello será necesario:
Figura 15. Se debe leer siempre la etiqueta antes de utilizar productos agroquímicos |
Figura 17. Llevar ropa de protección adecuada al mezclar productos químicos |
Figura 16. Colocar el equipo de
preparación en un lugar despejado
2.3.6. Aplicación de plaguicidas
La utilización de plaguicidas en condiciones de segundad está determinada por el cuidado y atención que se preste a las medidas de precaución antes, durante y después de la aplicación. Es muy conveniente elegir el producto agroquímico más seguro que actúe con eficacia y con el menor riesgo para las personas, el ganado, la fauna y la flora y el medio ambiente.
Existen diferentes tipos de equipo de aplicación. El tipo de equipo que se ha de utilizar depende de:
En la presente guía no es posible dar instrucciones sobre seguridad relativas a toda la maquinaria de apli
cación de productos agroquímicos. Se enumeran algunos principios generales, particularmente con respecto a la utilización de rociadores portátiles en relación con las precauciones que se han de adoptar en tres etapas separadas: antes de la pulverización, durante la aplicación Y con posterioridad. Estos principios se deben respetar para conseguir una aplicación eficaz y segura.
Antes de examinar esas etapas, todos los usuarios de productos agroquímicos deben asegurarse de que han recibido una formación adecuada para utilizar el pulverizador. Si se puede recurrir a algún asistente, éste debe haber recibido también la instrucción adecuada. Los usuarios deben asegurarse de que su formación ha abarcado los aspectos siguientes de la aplicación:
Los usuarios deben asegurarse de que el manual de instrucciones del usuario (o cualquier guía de instrucciones de funcionamiento análoga) contenga instrucciones detalladas sobre:
y que esté siempre disponible para ser consultado, en caso necesario.
2.3.6.1. Precauciones antes de la pulverización
2.3.6.2. Precauciones durante la aplicación
Figura 18. Vertido correcto de un gran
recipiente con la boquilla en la parte superior
Figura 19. Tenga cuidado con los cables eléctricos aéreos
En las figuras 20 y 21 se muestran métodos correctos de pulverización manual.
Figura 20. Método correcto de
utilización de un pulverizador de mochila
Figura 21. Cuando se rocíen árboles,
observar la velocidad y dirección del viento
2.3.6.3. Precauciones con posterioridad a la pulverización
Figura 22. Limpieza a fondo de todo el equipo
utilizado para la aplicación de productos agroquímicos.
Póngase cuidado en no
contaminar el medio ambiente con aguas residuales
2.3.6.4. Regreso a la zona tratada
El intervalo de tiempo que debe transcurrir entre la aplicación de un producto agroquímico y la entrada en la zona tratada por razones de seguridad se designa como plazo de seguridad. Es un intervalo durante el cual las trazas del producto químico habrán sido absorbidas por el cultivo o habrán desaparecido de otro modo de las superficies de las plantas. En la práctica, el plazo de seguridad está sometido a muchas variables, como la índole y la toxicidad del producto, el ritmo de aplicación, las condiciones climáticas y la superficie del cultivo tratado.
El período mínimo para regresar a la zona tratada debe aumentar sustancialmente, si la entrada en esa zona provocaría la exposición a un contacto cutáneo no sólo ocasional, en caso de que entraran en esa zona personas que podrían ser sensibles. Entre éstas, cabe incluir a los niños y a otras personas que es probable que tengan alergias cutáneas u otras reacciones adversas análogas al exponerse a trazas de productos químicos.
Si es preciso regresar a una zona tratada antes de que transcurra el plazo de seguridad, se debe Hevar una ropa protectora idónea para el plaguicida.
El plazo de seguridad no debe confundirse con el intervalo de recolección, que es el período que transcurre entre la aplicación del producto agroquímico y la recolección de una cosecha destinada al consumo.
Puede haber circunstancias en que se prescriba también un plazo de seguridad para la entrada de los animales. Los animales pueden ser particularmente vulnerables al producto agroquímico dispersado o al efecto del producto agroquímico sobre la vegetación a la que podría dar un gusto o un olor diferente. Es posible que esto induzca a los animales a comer plantas que de otro modo evitarían (por ejemplo, la pulverización de herbicidas sobre la hierba lombriguera o suzón).
Plazos mínimos de seguridad
Los siguientes plazos de seguridad pueden garantizar la protección necesaria en condiciones normales de utilización:
Producto agroquímico | Plazo de segundad sugerido |
a) Cualquier producto agroquímico que especifique en la etiqueta o en la ficha de datos un requisito específico con respecto al plazo de seguridad | Como se describe en la etiqueta o en la ficha de datos |
b) Cualquier producto agroquímico que se clasifique como tóxico o muy tóxico y que se aplique en forma pulverizada, en polvo o en gránulo o en cualquier otra forma al aire libre, como en un campo, huerto, viñedo o plantación de lúpulo | Tres días |
c) Cualquier producto agroquímico que se clasifique como nocivo, irritante o corrosivo, pero que se aplique como en b) | Dos días |
d) Cualquier plaguicida no clasificado, pero al que se aplicarían, de otro modo, las circunstancias de b) | Un día |
e) Cualquier plaguicida utilizado como fumigante o gas de tratamiento dentro de un edificio, invernadero, cobertizo para el cultivo de hongos u otro espacio cerrado | Doce horas, pero se ha de ventilar primero durante por lo menos una hora o más para lograr un cambio completo del aire |
Durante el período en el que esté prohibido entrar en cualquier zona tratada se deben adoptar medidas para que las personas interesadas tengan conocimiento de la restricción. En la mayor parte de los casos debería bastar un signo de advertencia del peligro, colocado en un lugar destacado en las entradas como en los puntos de acceso a los campos y a los senderos. Sin embargo, habrá situaciones en que los signos sean insuficientes. Si es probable que entren en una zona tratada niños o adultos con dificultades para leer o ver, se debe utilizar otro medio de advertencia igualmente eficaz, como un cercado o anuncios por medio de altavoces.
2.3.7. Otras aplicaciones de productos agroquímicos
Los productos agroquímicos se aplican asimismo como productos veterinarios, fertilizantes y sustancias químicas básicas. Las medidas de precaución antes descritas se aplican asimismo a estos tipos de productos. Sin embargo, el usuario tendrá que estudiar más a fondo los peligros que entrañan métodos distintos de aplicación de los productos agroquímicos. Se deben adoptar las precauciones que ilustran los ejemplos siguientes:
Figura 23. Evítese la contaminación que puede
producirse al sacudirse los animales después de un baño con plaguicidas
Figura 24. Al bañar a los animales utilícese ropa de protección personal
Figura 25. Ropa de protección personal adecuada
para trabajar con ácido fluorhídrico
2.3.8. Derrames
El derramamiento de productos agroquímicos constituye un desperdicio y un peligro. Debe evitarse siempre que sea posible, pero cuando se produce deben tomarse medidas inmediatas al respecto.
Algunas causas comunes de derramamiento:
Entre las medidas que se han de adoptar en caso de derramamiento cabe mencionar las siguientes:
Figura 26. Utilización de arena para detener
y eliminar el derrame de un producto agroquímico
2.3.9. Eliminación de los recipientes y los desechos
Habrá situaciones en que sea necesario eliminar sin peligro los productos agroquímicos almacenados. Es posible que ya no se necesiten o que estén caducados, o que se haya roto el embalaje o dañado el recipiente. Asimismo, es preciso eliminar en condiciones de seguridad los depósitos de derrames recuperados, elementos descartados de equipo fuertemente contaminados con productos agroquímicos, los desechos acuosos contaminados como las aguas de los baños parasiticidas de los animales y los recipientes vacíos.
Durante la eliminación de desechos se deben adoptar las medidas generales siguientes:
Figura 27. Los recipientes y los desechos deben enterrarse a una profundidad de 1 metro
Figura 28. Elegir un lugar seguro para enterrar
los desechos de productos agroquímicos
Figura 29. Quema de recipientes de productos agroquímicos
Temas de debate y actividades (sección 2.3)
1. Embalaje
1.1 Enumeración de los diferentes tipos de embalaje utilizados para conservar los productos agroquímicos en su almacén. ¿Qué tamaños y volúmenes tiene?
1.2 ¿Ha comprado usted en el pasado algún envase dañado a precio reducido? En caso afirmativo, ¿actuaría de manera distinta ahora? ¿Cómo?
1.3 Indique dos buenas razones por las que no com praría envases dañados de productos agroquímicos.
1.4 Enumere cinco aspectos que considere importantes para que un embalaje llene los requisitos.
2. Transporte
2.1 ¿Quién transporta sus productos agroquímicos?
2.2 Cuando efectúa usted el transporte, ¿qué medio utiliza: carro, camión abierto o camión?
2.3 ¿Transporta usted con regularidad o en ocasiones productos agroquímicos junto con otros productos como alimentos?
2.4 ¿Qué precauciones toma para que esos otros productos no se contaminen?
2.5 ¿Ha sufrido usted alguna contaminación por derramamiento o por daño del recipiente durante el transporte? En caso afirmativo, ¿cómo sucedió? ¿Cómo se enfrentó a la situación?
2.6 ¿Cómo puede usted evitar que se produzca en el futuro un derramamiento o un daño del recipiente de ese tipo? Enumere cinco medidas que podría adoptar para garantizar la seguridad y la salud en el transporte de productos agroquímicos.
3. Trasvase
3.1 ¿Ha tenido alguna vez necesidad de trasvasar productos agroquímicos de un recipiente a otro? En caso afirmativo, ¿qué precauciones tomó? ¿A quién consultó?
3.2 Enumere cuatro medidas que podría adoptar para garantizar la seguridad y la salud en el trasvase de productos agroquímicos a otro, recipiente.
4. Almacenamiento
4.1 ¿Qué dimensión tiene su almacén?
4.2 ¿A qué distancia está de su vivienda?
4.3 ¿Dónde mantiene el registro de sus productos almacenados? ¿Con qué frecuencia efectúa inventarios?
4.4 ¿Cuántas personas, aparte de usted, están autorizadas para entrar en su almacén? ¿Ha entrado alguna vez alguna persona no autorizada? En caso afirmativo, ¿qué medidas adoptará para evitar que eso vuelva a ocurrir?
4.5 ¿Qué precauciones especiales toma para que los niños no tengan acceso al almacén?
4.6 ¿Cómo se asegura usted de que no tengan acceso a su almacén personas no autorizadas?
4.7 ¿Se ha producido alguna vez algún robo o hurto? En caso afirmativo, ¿qué medidas adicionales de seguridad ha tomado?
4.8 ¿Qué disposiciones especiales ha adoptado para facilitar el almacenamiento después del transporte?
4.9 ¿Ha informado usted a las autoridades locales, a la brigada de bomberos y al inspector de agricultura sobre el emplazamiento las cantidades y los productos almacenados?
4.10 ¿Se ha producido alguna vez en su almacén algún derrame o incendio que afectara a productos agroquímicos? En caso afirmativo, ¿qué hizo? ¿Cometió algún error que provocara: a) su contaminación; b) la contaminación de otros; c) la contaminación de corrientes de agua o de cualquier otro elemento del medio ambiente?
4.11 Enumere siete medidas que considere importantes para garantizar la seguridad y la salud en el almacenamiento de productos agroquímicos.
5. Distribución
5.1 ¿Cuenta normalmente con algún ayudante para que lo secunde durante la distribución de los productos químicos? En caso afirmativo, ¿ha sido instruido por usted? ¿Cómo se asegura de que adopta las mismas precauciones que usted?
5.2 Enumere cinco medidas que podría tomar para garantizar la seguridad durante la distribución de los productos agroquímicos.
6. Aplicación de plaguicidas
6.1 ¿Quién lo instruyó en la pulverización de plaguicidas? ¿Tiene usted una licencia? ¿Existe algún procedimiento de concesión de licencias o de certificación de competencia? ¿Recibió usted un certificado después de su formación? En caso negativo, ¿por qué no fue posible?
6.2 Enumere los tipos de equipo que utiliza.
6.3 ¿Con cuánta frecuencia verifica que el equipo está en buen estado?
6.4 Enumere las medidas que es preciso adoptar para garantizar la seguridad y la salud en los casos siguientes: a) antes de la aplicación; b) durante la aplicación; c) después de la aplicación.
6.5 ¿Cuál es el período de reingreso? Prepare un diagrama en el que se indiquen los períodos de reingreso que respeta después de la aplicación de los plaguicidas que está usted utilizando.
7. Otras aplicaciones de productos agroquímicos
7.1 ¿Cría usted animales? En caso afirmativo, enumere los productos veterinarios que emplea.
7.2 Enumere los fertilizantes que emplea.
7.3 Enumere cuatro medidas que tomaría para garantizar la seguridad y la salud en el uso de productos veterinarios.
8. Derrames
8.1 Describa el caso más reciente de un derramamiento de producto agroquímico con el que haya tenido que enfrentarse.
8.2 Enumere cinco medidas que considere importantes para garantizar la seguridad y la salud al hacer frente a un derrame de producto agroquímico.
9. Eliminación
9.1 ¿Dónde está el lugar donde procede a la eliminación? ¿Podría dibujar un esquema de ese lugar?
9.2 ¿Conoce a alguien de su localidad que utilice recipientes de productos químicos para otros fines, por ejemplo para almacenar agua de lluvia que se utilizará durante las sequías? ¿Qué le aconsejaría usted?
9.3 ¿Con qué frecuencia elimina sus recipientes vacíos o desechos?
9.4 Enumere cinco medidas que adoptaría para garantizar la seguridad y la salud en la eliminación de recipientes de productos agroquímicos.
9.5 ¿Quema usted los embalajes vacíos? En caso afirmativo, enumere cinco elementos que considera importantes para garantizar la seguridad y la salud durante la calcinación.
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